Descripción
Agua termal, a la Esencia de Árbol de Té.
Por su alta concentración de minerales y oligoelementos, las aguas termales han sido tradicionalmente reconocidas para el cuidado de la piel sensible. Se le otorgan importantes propiedades estéticas , como reforzar la protección natural de la piel y prevenir el enrojecimiento prematuro.
Las aguas de Caldas de Luna fueron reconocidas como minero-medicinales ya en 1917.
El agua termal se utiliza como:
Limpiador facial por la mañana y por la noche Para cerrar los poros y evitar la deshidratación. Después del afeitado como tónico «after-shave». Como fijador del maquillaje. Para refrescar la cara en ambientes cargados, tras mucho tiempo frente a la pantalla del ordenador, o ante los sofocos de la menopausia. Previene enrojecimientos. Recomendada para el acné, la psoriasis, eczemas, rosácea, dermatitis y, en general, para afecciones de la piel.
Apto para veganos
Presentación: 100 ml